El diseñador Brian Alexander sabía que para las organizaciones era un beneficio instalar hileras de escritorios de lado a lado ubicados con proximidad. Condensa las huellas inmobiliarias y hace que trabajar en equipo sea tan simple como girar hacia la derecha o hacia la izquierda. Su dificultad radicaba en brindar un nuevo nivel de privacidad a estos sistemas de escritorios.
Como estudioso observador de la conducta humana, especialmente en el lugar de trabajo, Alexander notó que “una alta densidad y reducida privacidad pueden provocar gran distracción y reducir el rendimiento. Trabajar con proximidad aumenta las posibilidades de que las personas se distraigan por ruido, movimiento, o simplemente por sentir la presencia de otras personas cerca”. Abordar estas distracciones al momento de mejorar los sistemas de escritorios elevados fue la idea subyacente en Renew Link.
Al escalonar las superficies de trabajo en ángulos poco profundos, Alexander redujo radicalmente una de las mayores distracciones: levantar la mirada y hacer contacto visual con el compañero de enfrente. Pero se mantiene la proximidad que promueve la interacción. “Al brindar a las personas un nuevo nivel de opción individualidad en los entornos de trabajo compartido”, afirma, “demostramos respeto por su aporte a la organización, ayudándolos a sentirse tan cómodos y productivos como sea posible”.
